No puede resumirse en un post ni en una entrevista como la que tendré esta tarde para la «Asociación Española de Ayuda Mutua contra la Fobia Social y los Trastornos de Ansiedad» lo que ha supuesto y lo que supone en mi vida la ansiedad social.
No puede resumirse un rasgo que está en mi y que seguramente me acompañará toda mi vida.
La inseguridad y la falta de confianza que durante un tiempo se vistieron y etiquetaron como «ansiedad social» eran las de aquel niño «empollón», «gordo», «maricón», y muy sensible, que en el colegio destacaba por lo que no iba a ser aplaudido, y que afuera disfrutaba sólo, encerrado en su casa, la de aquel adolescente que no encontraba su lugar y que siempre se sentía menos en presencia de otros, inseguro con su cuerpo, con sus dientes, que bebía los fines de semana pues ahí se olvidaba de todo ello, y creía integrarse más.
A partir de los 23 años, el teatro, la formación en terapia gestalt, la automirada, y comenzar a mostrarme, y compartirme, lo cambiaron todo.
Ojo, lo cambiaron tampoco. Abrieron otras posibilidades. Descubrí otras partes, me asomé a ellas y comencé a expresarlas. Descubrí algo que desde entonces vengo reivindicando: cada uno de nosotros tiene un tesoro, algo muy luminoso, solo que a veces es cuestión de trabajo, poderlo ver. Descubrí mi potencial. Sí, potencial, pues cuando cambiamos por dentro el mundo cambia afuera.
Solo cuando uno descubre su propio autoapoyo, entonces y solo entonces puede volar.
No puede resumirse aquella inseguridad en ninguna entrevista, pues además no está sola, hoy en día soy aquel mismo niño, la inseguridad aparece muchas veces sí, quizá más suavizada, pero va a acompañarme siempre, solo que ahora es asumida, integrada, jugada, expresada, llorada y reida, y sobretodo, ahora es compañera y ahora es compartida.
No me gustan las etiquetas, ahora titulo el texto con ella pues a veces para entendernos hay que ponerle nombre a las cosas, y sobretodo, porque hoy quiero y reivindico a ese yo al que nunca más pienso esconder, ansioso social.
(una de esas primeras fotografías compartidas, a los 26 años, en fotolog)
Guapo¡¡¡¡