Mirémonos

«Muchas personas pequeñas

en lugares pequeños

haciendo cosas pequeñas

pueden cambiar el mundo»

(Eduardo Galeano)

 

Cómo surge “Mirémonos”

Como fotógrafo y psicólogo, la mirada viene siendo el nexo entre ambos mundos y sobre el que vengo realizando y proponiendo todo mi trabajo.

Mirémonos llegó como una evolución de ejercicio que trabajaba en talleres. Un día decidí experimentarlo solo, sin saber que iba a ocurrir, en la calle. Fue en abril de 2016 cuando realicé la primera experiencia sentándome en mi barrio, con un cartel que indicaba “Mirémonos”. La primera persona que vino, desconocida, se acercó a mi con una gran sonrisa, y me regaló este girasol. El mundo, claramente, me estaba diciendo: Sí. 

En qué consiste

“Mirémonos” nos invita a algo muy sencillo que a su vez puede parecer complejo. Sencillo pues lo que propone es, literalmente, abrirnos a un espacio de encuentro a través de la mirada, dejando que naturalmente el encuentro se abra y se cierre, sin tiempos marcados, sin reglas. La única invitación es dejar a un lado las palabras, pues suelen ser una forma de evitar el contacto, y quizá dejarlas, si así lo deseamos o lo necesitamos, para el final. 

Plantearlo en un espacio público implica una invitación y a la vez una llamada de atención al mundo en el que vivimos y en el que hemos dejado de mirarnos , en el que vamos con prisa a todas partes, mirando casi siempre a una pantalla, en el que se nos invita a desconfiar, en el que estamos deshumanizándonos, dejando de contactar con los demás…

Puede parecer compleja pues no estamos aconstumbradxs a este tipo de contacto y mucho menos con personas desconocidas, no se nos educa a expresarnos con honestidad, con presencia y a poder contactar desde ese espacio vulnerable con otras personas. Además, se nos educa a un mundo en el que necesitamos controlar las situaciones, que nos den instrucciones, saber qué va ocurrir. 

Y no. “Mirémonos” ocurre en presente y es siempre impredecible. 

Mirémonos, por tanto, es la invitación a vivir esa incertidumbre, a darnos permiso para esa experiencia, a vivirla, a experimentarla y a ver qué nos mueve. 

Volver a mirarnos, hoy en día

Vivimos en una sociedad cada vez más “ciega”, donde se nos educa en la desconfianza hacia el otro y en el individualismo. Nos encontramos en en un momento en el que prácticamente no hay espacios para el silencio, o la escucha. Así, caminamos por nuestras ciudades con prisa, no nos paramos a observar y vamos cada vez más atentos a las pantallas, dejando de observar a fuera y dejando de mirarnos entre nosotros.

Vivimos un momento de especial polarización, en la que se centra el discurso más en aquello que nos diferencia que en aquello que nos une.

A su vez, desde 2020, la pandemia no ha hecho más que ahondar en esta tendencia cada vez mayor al aislamiento y al temor al contacto. 

El sentido de “Mirémonos”

Mirémonos propone al mundo una acción sencilla, gratuita y revolucionaria: volver a mirarnos. Y hacerlo en las calles, en las ciudades, en esos contextos en los que aún más se está perdiendo el contacto.

Mirémonos nos invita a volver a conectarnos desde lo que es puramente humano: la mirada. Recuperar la mirada como espacio de encuentro y conexión con las personas que nos rodean.

Generar experiencias de contacto positivas, cercanas, cotidianas y humanas. Mirar a los ojos y desde ese espacio acercarnos al otro, viendo más allá de las diferencias de edad, sexo, estatus, raza, religion, etc…

Tras las diversas experiencias realizadas y el feedback recibido se constata una realidad: Mirar y ser mirados desde esta apertura, respeto y cercanía, es un ejercicio movilizador, inspirador, terapéutico, sanador.

Cómo se desarrollan las experiencias “Mirémonos”

Las experiencias han sido distintas en función del lugar en el que se hayan realizado, de si se ha avisado con anterioridad, o no, y de si han sido realizadas en el marco de festivales u otras actividades donde existían en la programación, o no.

Lo básico para poder realizarse es que haya una persona con un cartel “Mirémonos” y que se encuentre disponible para la experiencia. A partir de ahí la invitación es muy sencilla: se trata de atreverse al ejercicio de sentarse y compartir miradas durante un determinado tiempo, el que ambas personas consideren. Aunque no hay normas, y lo más importante es escucharse y dejar que el ejercicio fluya (con cada persona puede ser distinto), se invita a intentar no hablar durante el experimento, o en todo caso a hacerlo al final, para que este hecho no nos desvíe del experimento. Normalmente con el verbo vamos a querer controlar la situación y nos vamos a ir de lo que ocurre simplemente al mirarnos, y respirar.

Existen distintas formas de participar:

  • Proponiéndolo: siendo una de las personas que tiene un cartel que indica “Mirémonos”, y con el que invita al resto de personas a sumarse al experimento. Esta persona puede situarse sentada en el suelo en un lugar determinado, o puede en algún momento incorporarse y caminar alrededor de otras personas mostrando el cartel e invitándoles a practicar el ejercicio.
  • Experimentándolo: Probando la experiencia y sentándose con cualquier persona que está disponible para el ejercicio.
  • Observándolo: Ocurre muchas veces que personas que no conocen la iniciativa y/o se la encuentran de casualidad, o simplemente necesitan un tiempo para atreverse a experimentarla, se sitúan en una posición desde la que observan otras interacciones.

Esta división es puramente arbitraria pues cada persona puede pasar por los tres roles a lo largo de toda una experiencia.

La mejor forma de entenderlo puede ser viendo algunos vídeos de experiencias que hemos realizado desde 2016, y sobretodo, estando.

 

 

Mirémonos con Fundación Entreculturas (2022)

Mirémonos en Cadena Ser (2019)

 

Mirémonos con handpan (2016)

Benimaclet Confussion

Roma 

Nuevas perspectivas: acercando Mirémonos al ámbito educativo y social

El día que propuse por primera vez Mirémonos, intuí que significaba un antes y un después, pero no intuía muchas cosas que vendrían después.

Mirémonos nació de forma impulsiva, como un atrevimiento, como un salto personal compartido. Ahora, enseguida fui consciente de que tras ese salto habían muchos pasos atrás, mucho recorrido de autoconocimiento, de autodescubrimiento, de autoaceptación; y después, muchas experiencias, mucho aprendizaje y muchas reflexiones alrededor del hecho de mirar, y de ser miradxs.

La experiencia de un «Mirémonos» por si sola era atractiva, potente, ahora, lo que la convertía en algo verdaderamente potente eran sus posibilidades para trabajar con ella y acercarla a ámbitos como el educativo y el social.

A lo largo de estos últimos años, y gracias a varias experiencias con Mirémonos en el ámbito de autoconocimiento, y sobretodo en el ámbito educativo y social, gracias el feedback de tantas personas participantes, he tenido la oportunidad de comprobar la potencia que tiene añadir a la propia experiencia “Mirémonos”, el desarrollo de talleres y en sí de espacios que acompañen a la experiencia en sí, para poder trabajar de forma más íntima y cuidada lo que mueve el ejercicio de mirarnos (a nosotrxs mismxs) y de mirar y ser miradxs por otrxs, y también para sensibilizar e inspirar a personas que no han participado nunca en la propuesta, y puedan ser agentes facilitadores de la misma.

En un proceso de parar, revisarme y hacerme preguntas, he sido del todo consciente de que Mirémonos llegó a mi vida para ayudar a darle aún más sentido.

Uno de los objetivos que cada vez persigo con más hincapie a través de la propuesta, es la de acercarnos, la de acercar a personas que quizá en el día a día no tienen la oportunidad de conectar con otras, y a su vez, a través de la experiencia, generar acciones que tejen barrio, que tejen sociedad, que construyen ciudad desde un ámbito tan bonito, necesario y humano como es la mirada. 

 

Por todo ello, este es un siguiente paso para el proyecto. Más allá de seguir experimentándolo en las calles como seguirá sucediendo de manera más o menos improvisada, he decidido comprometerme con Mirémonos de una forma más profunda, y poner mi granito de arena, para acercarlo al contexto educativo y social, desarrollando talleres y otras actividades para poder así trabajar toda su potencialidad como herramienta para una mejor relación con nosotrxs mismos, con las personas que nos rodean, y con la sociedad en la que vivimos.

Hasta la fecha he realizado talleres y experiencias «Mirémonos» en estos ámbitos con:

  • Fundación Entreculturas (2022)
  • Universitat Popular (2022)
  • jóvenes participantes en el proyecto la Akademia Valencia (2016, 2017, 2018, 2019, 2020, 2021 y 2022)
  • jóvenes participantes en un proyecto socioeducativo en Quart de Poblet (2018)
  • Igualment Fest (Ayuntamiento de Valencia, 2017)
  • jóvenes en el IES Ribalta de Castellón de la Plana (2016 y 2020)

Menciones a “Mirémonos” en artículos y entrevistas:

  • Entrevista en radio l’OM: del minuto 22’02 al 24’24

 

Vida y milagros.

Mirémonos nació en Ruzafa, en abril de 2016. Desde entonces, se ha realizado en una veintena de ocasiones en la ciudad de Valencia, y también en Castellón de la Plana, Onda, Alicante, Elche, Barcelona, Ávila, Zaragoza, Madrid, Buenos Aires, Córdoba (Argentina), Berlín, Roma, Londres y la ciudad de Tromso (en el círculo polar Ártico). En tres ocasiones, Mirémonos se ha realizado de manera simultánea, en varias ciudades a la vez, la última, en septiembre de 2019.

Mirémonos

El pasado 26 de septiembre fue muy emocionante para Mirémonos. Ante la invitación a compartir la experiencia en distintos lugares, personas en 13 ciudades del mundo, nos sentamos en un lugar para proponer que nos mirásemos.Este vídeo es un REGALO y a la vez un pequeño homenaje a lo que Mirémonos es, y a lo que Mirémonos movía en mi a escasos minutos de comenzar, y lo que movió en la Plaça de l'Ajuntament de Valencia. Cada vez es distinto, y en cada persona es distinto, y, qué os puedo contar, solo se puede saber si se experimenta.El jueves pasado, hicimos magia. Y ahora, gracias a Elvio y a Adrián, podemos recordarlo….Vídeo: grabado por Elvio Mínguez Félix y editado por Elvio y Adrián CronauerMúsica original de Adrián CronauerAgradecimiento especial al Ajuntament de València por apoyarnos en esta inicitativa….Mirémonos: Proyecto-experiencia desarrollada y coordinada por Jose Bravo FOTOCiudades participantes en este Mirémonos simultáneo: Valencia, Castellón (Sere Casañ), Elche (Terapeuta Gestalt Elche y Mónica UC, Zaragoza (Aitor Pablogorrán Fernández, Santander (Elena Brilla Como El Sol y @Lara Martínez), Valladolid (@Cris CaBe), Granada (Ale McCandless), Cartagena (Angeles Conejero), Barcelona (Solange Bendinelli), Madrid (Leidi Jorge), Roma (Costanza Pivanti), Budapest (Alba Ramírez García) y Ciudad de México (Lucero Yill). En el vídeo, justo en el momento en que hablaba a Elvio, hablaba de que en 10 minutos (a las 18'30h) comenzábamos simultáneamente en 10 ciudades españolas, aunque necesito destacar, que otras tres ciudades del mundo estaban participando ese mismo día. Dos (Budapest y Roma) ya habían comenzado una hora antes, y otra, Ciudad de México lo haría horas después.

Publiée par Mirémonos sur Mardi 1 octobre 2019

Como experiencia, Mirémonos ha formado parte de la programación de los festivales Igualment Fest (Ayuntamiento de Valencia, 2017), Benimaclet Confussion (Valencia, 2016 y 2018), Ruzafa loves Kids (Valencia, 2016 y 2018) e Imaginaria (Castellón, 2017). Ha formado parte de jornadas en la Facultad de Psicología de la Universitat de València, las Jornadas LGTBI en Onda (Castellón), y de la programación del Centre Cultural del Carme. 

Esta es nuestra última experiencia, en 2020, en Valencia.

 

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